¿Cómo anda la banda? Esta semana me atrasé un poquito pero les prometo que hay una buena razón: estamos trabajando para usted. Las famosas cositas ya están acá, y como en este espacio está el núcleo duro de mi comunidad, la gente que banca todas, les quiero dar un par de adelantos que me tienen entusiasmado. Primero, estamos camino a los tres meses de este newsletter así que estoy armando mi primer eBook. Me ceba mucho contarles que estoy laburando cada uno de los mails que les mandé, creando una versión extendida con más datita útil. Falta el nombre pero se me ocurre algo tipo: “Cómo empezar algo de cero y no aburrirse en el camino”, ¿qué opinan?
Y no termina ahí, también arrancaron las grabaciones de un podcast de charlas con creadores y creadoras de contenido, pero sobre eso no puedo decir mucho. Perdón mis newsletter friends, pero les prometo que en muy pocos días van a tener más datita. Todo eso por supuesto de la mano de Nicolás Inchaurrondo (a.k.a.: El vasco), mi nuevo aliado en esta cruzada de hacer… lo que sea que estoy haciendo. Bueno, se me hizo larga la intro pido mildis, pero hoy les traigo unos apuntes muy top tier.
Que guiso de lentejas te traje hoy. Empecemos por la pregunta que me hice y disparó todo esto: “¿cómo me llevo con la tecnología? Y estoy seguro alguna vez te lo preguntaste. Alguna vez probablemente quisiste borrar todas tus redes, o por el contrario capaz te da F.O.MO. (miedo a perderte de algo relevante) no mirar el celular. Capaz que tenes alguna amistad difícil de contactar porque solo tiene Telegram o telefono fijo, y capaz con otra algunas personas charlas en simutáneo por insta, snap y whapp. ¿notás los contrastes?
Me voy a permitir hacer uso de mi pergamino como comunicador porque entender la tecnologia en la comunicacion, en mi paso por la facu fue un debate transversal. Hay un par de conceptitos que todavía me acuerdo y son la “tecnofóbia” y la “tecnofília”.
“Tecnofobia se refiere al miedo, desconfianza o rechazo hacia la tecnología, mientras que tecnofilia denota una atracción o entusiasmo excesivo hacia las tecnologías.”
ChatGPT
Bajemos esto a tierra. Pensar que no podemos vivir sin el celular, sin las pantallas y redes sociales sería una mirada tecnofílica. La tecnología nos atraviesa en toda nuestra vida y no concebimos la vida sin ella. Y en el otro extremo, pensar que el mundo sería un lugar mejor sin todas estas pantallas nos para en la vereda de la tecnofóbia. Bien, si ya mojaron las patas, ahora metanse conmigo en este mar conceptual.
Tecnofilia: "Her"
En "Her", tenemos a Joaquin Phoenix en un futuro cercano, que se enamora de su asistente. Hasta ahí podría ser una novela de Estevanez, pero en esta película no es una persona real, es un asistente virtual. Sí, leíste bien, un sistema operativo. El flaco está tan metido que parece que habla con un humano de verdad. Esta peli te muestra cómo la tecnología se puede colar en nuestras vidas y hacerte sentir cosas de verdad. Yo por ejemplo me encariñé con la cafetera, me salva las mañanas.
Esta ficción se da un un futuro cercano. El guión exacerba tanto la tecnología que crea un protagonista cuyo trabajo es escribir dedicatorias personales para fechas importantes. Es decir, la gente se sumergió tanto en la conexión humano-pantalla que se olvidó como conectar humano-humano, y le paga a alguien para que le haga una dedicatoria a un ser querido por su cumpleaños.
Tecnofobia: "The Matrix"
Ahora, pasemos de un futuro cercano a un mundo distópico y vámonos al otro extremo con "The Matrix". Pedazo de peliculón, aunque seguro que nadie leyendo esto vio la trilogía completa. Keanu Reeves se entera de que su vida es una mentira, y que está viviendo en una simulación manejada por máquinas super inteligentes. Esta peli te deja con un miedo bárbaro a que la tecnología tome el control y pasemos a ser títeres pantalladependientes. Que ya no tengamos poder de decidir, y que en nombre de los avances tecnológicos terminemos viviendo enchufados en sótano en el medio del desierto.
Para alguien que vivió en el siglo XIX, nosotros SOMOS una sociedad de cyborgs. Un cyborg es un ser que combina componentes orgánicos y biomecánicos, fusionando partes humanas con tecnología para mejorar sus capacidades naturales.
Nuestro celular es un buen ejemplo, porque es una extensión de nuestro ser: nos recuerda cosas, almacena las contraseñas que a esta altura ya son demasiadas, y así puedo seguir enumerando, pero se entendió. Visto así, Black Mirror no parece tan lejos. Pero tengo un último conceptito que les puede interesar, porque es el que me ayudó a mi dejar de polarizar esta discusión y encontrar mi punto de vista entre los matices.
La mirada culturalista de la tecnología se centra en cómo esta influye y es influenciada por las prácticas culturales y sociales.
ChatGPT
Facebook se creó para conectarse entre estudiantes en la universidad de Harvard, y unos años después, lo usamos para vender la bici usada en Market Place. Twitter nació para hacer “micro-blogging” en 140 caractéres y hoy… no se que es hoy. Bueno, el punto es que esta mirada culturalista viene a mostrarnos la fisuras. No importa lo que inventen con la tecnología, como sociedad siempre vamos a darle nuestro propio uso. Puede ser por necesidad o por creatividad, pero no va a responder a la idea inicial. Y esto me parece la clave para cerrar la idea.
Tal vez no tenes que borrar tu instagram, podes empezar por hacer un detox, dejar de seguir esas cuenta que justamente te hacen pensar en borrar todo. Cada cual tendrá sus razones.
Una vez que das el primer paso y filtras la 💩 vas a poder conectar con el algoritmo desde otro lado. Porque el algoritmo son códigos, pero se basan en que uso le damos nosotros.
Bueno, vamos a ir cerrando acá. Todo lo que me quedó afuera en cuanto a data, te prometo que va a estar en el e-Book, pero mi sentido arácnido me dice que me estoy extendiendo. Además, te escribo esto minutos antes de que juegue Argentina - Chile por el pase a cuartos de final, así que nos vimi.
Más data que post: Además de las pelis que mencioné, si te copa la temática, después de leer esto te invito a ver Black Mirror, sobre todo la primera temporada. Vas a flashar.
Hasta la próxima,
Pepe.